Lectura y comunidad
El contexto actual, cambiante y complejo, requiere el desarrollo de saberes y habilidades esenciales que permitan a los estudiantes comprender mejor la realidad y participar activamente en sus comunidades. La lectura como práctica social puede contribuir a este objetivo. A ello responde el diseño de la práctica educativa Lectura y Comunidad, desarrollada en una escuela secundaria de San Luis Potosí, México. Se basa en la metodología activa y participativa del aprendizaje basado en proyectos comunitarios, con el objetivo de que los estudiantes analicen, reflexionen y transfieran conocimiento sobre un aspecto concreto de la realidad de su comunidad, a partir de la lectura como elemento detonador.
Introducción
Los contextos local, nacional y global, notablemente cambiantes, así como la reciente crisis a raíz de la emergencia de salud pública mundial que provocó la COVID19, han acrecentado la violencia, la inseguridad y el deterioro de los lazos sociales visiblemente en niños, niñas y adolescentes, lo que hace urgente trabajar en el replanteamiento de los valores como la diversidad, la inclusión, la empatía, que propicien la reflexión en torno a una convivencia armónica.
De lo anterior se desprende la necesidad de generar múltiples oportunidades y espacios para el desarrollo de saberes y habilidades esenciales, que propicien una comprensión más profunda de la realidad, así como una participación más activa en las comunidades de cada escuela, lo que confiere a la lectura un papel fundamental como práctica situada en un contexto particular.
La idea atiende a los ejes de trabajo que sugiere el informe de la UNESCO (2022), en lo referente a la configuración de escuelas que cuidan, mediante la promoción del autocuidado, pero también, del cuidado de los lejanos, por ejemplo, las personas migrantes o personas con discapacidad.
Asimismo, se intenta promover la flexibilidad organizativa de la escuela. Por un lado, al reunir en un solo proyecto los lenguajes que tradicionalmente se separan por asignaturas, como artes, a pesar de ser un lenguaje expresivo, y español como lengua materna. Por otro lado, al intentar ampliar el espacio de aprendizaje más allá de la escuela.
Finalmente, sobre el papel del docente que propone el citado informe, se valida y refuerza su autonomía que, ahora como nunca en el caso de México, promueve el recién incorporado modelo educativo, denominado Nueva Escuela mexicana (NEM), al tiempo que se contribuye a una cultura de colaboración.
Descripción
La práctica educativa Lectura y Comunidad, se desarrolló en el nivel básico de secundaria, con un grupo de tercer grado. Participaron los profesionales del campo formativo de lenguajes, específicamente los docentes de las disciplinas de español y artes, con el fin de romper los límites que plantean las asignaturas.
El objetivo principal fue valorar la lectura como práctica social que contribuye en la construcción de relaciones de cuidado.
Los objetivos particulares fueron los que siguen:
- Leer un texto literario que reproduzca diversos aspectos del mundo.
- Ofrecer espacios para la lectura que posibiliten la interacción para la construcción conjunta del conocimiento.
- Dotar de sentido práctico la lectura de distintos géneros al relacionarla con el contexto real del lector.
- Amplificar el contenido de un texto mediante el desafío de hallazgos por investigación, vivencia, análisis y reflexión.
- Desarrollar procesos que vinculen creativamente la escuela con su entorno.
- Usar las tecnologías digitales para fines comunicativos y de información.
- Emplear adecuadamente distintos lenguajes y discursos.
La práctica se desarrolla en cuatro momentos. En el primero, de motivación a la lectura de un texto literario, se utilizan distintas modalidades de lectura y espacios físicos que le aporten sentido. El segundo momento es la problematización; a partir de lo leído, los estudiantes exploran su realidad a través del diálogo, sus vivencias, la investigación y la reflexión para entrar en temas de su comunidad. El momento de producción de piezas comunicativas tiene lugar cuando los estudiantes emplean creativamente distintos lenguajes y discursos para expresar su postura respecto de la situación identificada. El cuarto momento es de transferencia; los estudiantes movilizan los materiales producidos para promover la reflexión en comunidad sobre dicha situación.
Mediante esta secuencia, los estudiantes leen libremente y estimulan sus habilidades en este ámbito; desarrollan el pensamiento crítico y el trabajo colaborativo, con una contribución en la formación de ciudadanos comprometidos en la construcción de un mundo más justo.
A continuación, describimos con algo más de detalle la secuencia de actividades, desarrollada en ocho semanas:
- Momento 1. Motivación a la lectura. Durante la puesta en marcha de la práctica los estudiantes, organizados en equipos, exploraron algunos títulos y seleccionaron una historia en torno a la migración. Se trata de Puerto Libre, de la escritora Ana Romero; es la historia de una niña que a los ocho años enfrenta la partida a Estados Unidos en busca de una mejor calidad de vida; los capítulos cuentan historias secundarias de otros migrantes con finales no siempre felices, pero sí reales.
- Momento 2: Problematización. Se trata de identificar cuáles de los personajes, elementos o situaciones presentes en la lectura, se ven reflejados en la comunidad (escuela, familia, vecindario) o en la localidad. Los estudiantes elaboraron mapas mentales a partir de la lectura realizada, señalando el tema de la migración como central en la historia, y como vivencia familiar para algunos. Durante la tarea de observación del entorno y la indagación en medios de comunicación locales, identificaron que la migración es una situación real en su entorno. La comunicación de los hallazgos anteriores se dio en sesiones grupales, donde se precisaron semejanzas entre la historia leída y lo que pasa en la comunidad. Se utilizó una rúbrica para evaluar el seguimiento de la información y otra para evaluar la discusión y determinar si se está en posibilidad de avanzar el proyecto.
- Momento 3: Producción de piezas comunicativas. Con apoyo de los profesores de lengua y artes, los estudiantes produjeron piezas comunicativas para expresar una reflexión respecto del problema, a través de todo tipo de recursos artísticos (escénicos, musicales, poéticos, plásticos…). Se acordó la producción de dos carteles y dos pinturas para plasmar ideas en torno a la migración como problemática presente en la comunidad, a la cual los estudiantes se refirieron como una situación que requiere, en sus propias palabras, “ponerse en el lugar de las personas migrantes”, “mirar a las personas migrantes como a cualquier otra persona de la comunidad y no como extraños”. Se utilizó una rúbrica para evaluar la elaboración de la pieza artística o producto comunicativo.
- Momento 4: Transferencia. Los profesores implicados en el proyecto apoyaron la gestión con un centro comunitario para realizar conjuntamente la movilización de los materiales producidos y promover la reflexión en comunidad sobre la situación identificada. Mediante un acuerdo con la biblioteca pública Primo Feliciano Velázquez, cercana al centro escolar, se participó en “La Tarde Cultural”. La intervención de los estudiantes consistió en la presentación de una breve reseña del libro cuya lectura detonó la reflexión y el trabajo realizado. Asimismo, se presentaron pinturas y carteles que plasmaban ideas en torno a la presencia, cada vez más frecuente, de personas migrantes en la comunidad. La presentación implicó la escritura de textos como la reseña y el guion, así como llevar a la oralidad lo escrito. Los textos realizados y la exposición oral se evaluaron mediante rúbricas.
Se realizó una evaluación formativa del proyecto con el fin de retroalimentar el proceso y poder hacer los ajustes necesarios. Esta evaluación privilegia la observación y el registro en rúbricas para los momentos clave del proyecto. Asimismo, es importante la evaluación entre pares, donde los estudiantes reflexionan sobre su propio aprendizaje y el de sus compañeros. Finalmente, la evaluación del proyecto considera la contribución real a la comunidad.
Resultados
Respecto del objetivo general de valorar la lectura como práctica social, más allá de atribuirle un uso instrumental e individual como tradicionalmente se estila, es claro el impacto en la organización de la escuela, flexibilizando los espacios escolares más allá del aula, y aportando además grandes beneficios en lo que respecta a su adaptación al contexto y a la configuración de una escuela que cuida, no solo en su interior, sino que cuida también de los cercanos y aún de los lejanos, tal como lo refiere el informe de la Comisión sobre los futuros de la educación (UNESCO, 2022).
Asimismo, se puede hablar de una comprensión lectora que propicia una interpretación reflexiva de la realidad. Esto se refleja en el interés por parte de los adolescentes al leer y encontrar el sentido práctico de la lectura, visible en una mayor interacción en las sesiones de discusión para determinar en qué medida lo leído tiene semejanza con la realidad. Igualmente se percibe una apertura de la escuela hacia la comunidad, al desarrollar vínculos con un centro comunitario.
Silvia J. Villaseñor Rodríguez y Jorge Alberto Benavides son docentes del Instituto La Paz A.C., una escuela privada de secundaria y bachillerato en San Luis Potosí (México).
Referencias
- Montejano, J. (2021). Reseña histórica de la fundación del Instituto La Paz A.C. San Luis de Potosí, México.
- Romero, A. (2012). Puerto libre. Ciudad de México: SM.
- UNESCO (2022). Reimaginar juntos nuestros futuros: un nuevo contrato social para la educación. Madrid: Fundación SM. Recuperado de este enlace.